viernes, 23 de enero de 2009

La Tablada y los dictadores buenos

Artículo del Clarín de hoy sobre el ataque a la Tablada, que culmina con la siguiente frase: "Hubo 39 muertos: 9 militares (4 eran conscriptos), 2 policías y 28 guerrilleros: éstos denunciaron fusilados y desaparecidos. El ataque concitó el repudio unánime de los partidos y la sociedad. El periodista Osvaldo Soriano escribió días después: "No habrán querido que se los llame terroristas, pero su metodología los acerca más a Hitler que a Lenin. Usaron el engaño como punto de partida para una supuesta sublevación popular y partieron de una falsedad histórica: atribuir a otros la responsabilidad de un crimen para usarlo, con disimulo, en provecho propio".

Me causó gracia la afirmación "pero su metodología los acerca más a Hitler que a Lenin" como si todo lo que se enumera a continuación fuera Copyright exclusivo de Hitler. Siempre lo mismo, los dictadores buenos y malos.

Volviendo al tema principal, todavía recuerdo la transmisión en vivo por TV y la tanqueta pasando por encima del auto a toda velocidad. Todos esos terroristas fueron dejados en libertad por De la Rúa. Como la naturaleza es sabia Gorriarán Merlo murió años más tarde.

El artículo, demasiado progre para mi gusto. Un tipo que se alza en armas durante un gobierno democrático, mata y asesina a sangre fría (conscriptos que están cumpliendo con su deber como ciudadano) no merecen piedad ni misericordia. Claro que, si los atacantes en lugar de ser de izquierda se hubieran identificado con una esvástica, todavía seguirían en prisión y en cada aniversario del ataque habría una gran movilización "popular" recordando el "ataque golpista".
¿O no?

3 comentarios:

Rothbard dijo...

Para mi les tendrían que haber aplicado el código militar, y haberlos fusilado a todos.

Francisco D'Anconia dijo...

Tenés un muy buen blog, gracias por agregarnos a tus links.
Los crímenes cometidos por la izquierda siempre serán tratados de forma distinta de los de "derecha". Los de derecha serán demonizados y recordados todos los días, mientras que los de izquierda encontrarán sus apologistas o, en el mejor de los casos, son barridos bajo la alfombra.
Me hizo acordar a este caso reciente donde llevaron presos a un grupo de skinheads solo por venerar la tumba de un nazi, mientras que los militantes de izquierda pueden hacer lo mismo con sus ídolos (que asesinaron cientos de millones de personas) y no les pasa nada.
Saludos, buen blog.

Pablo dijo...

Gracias Francisco por tus elogios. Tus comentarios siempre serán bienvenidos.
Saludos