"No hay inflación, hay un reacomodamiento de precios" dijo el ministro de economía sin que se le moviera un músculo.
Puedo aceptar que me mientan, porque es la forma que tienen nuestros representantes para hacer política. Pero, lo que no tolero, es que me tomen por pelotudo.
Este anuncio sigue la línea establecida por el gobierno de tapar el sol con un colador. Las cifras del IndeK por ejemplo, van de la mano con esta política. En un post de septiembre del año pasado titulado Kirchnelandia sin pobres comentaba este mismo asunto.
El ultraK gobernador de tucumán, Alperovich señaló que "nadie puede negar la inflación" y el bigote que habla, Anibal, afirmó que "Acá no hay un aumento generalizado de precios"
Sin embargo, Moyano, reclama un aumento del 20%. Me parece correcto que pretenda que sus asociados ganen más de $5.500. ¿A quién no le gustaría? El problema es que las cifras de inflación oficial están muy por debajo del 20 y los aumentos que recibe el trabajador -costo para el empleador- se trasladan al consumidor. Llegará el momento que convendrá parar los camiones, antes de fundir la empresa. Este es un ejemplo que puede trasladarse a cualquier otro rubro.
Lo que está sucediendo ahora, ya fue advertido por muchos economistas. Sin embargo, el gobierno, tiene en su mira poder sobrevivir los próximos dos años, manoteando de donde pueda.
Eso sí, a los jubilados les aumentan un 8% a los $800 de jubilación mínima que cobran. ¿Me puede decir cómo hace Ud. para sobrevivir un mes, con $864?
Como dijo J. F. Kennedy, "se puede engañar a muchos poco tiempo, o a pocos mucho tiempo. Pero no se puede engañar a todos todo el tiempo".
Una consulta, ¿Y"Lassie" Moreno?
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