lunes, 11 de enero de 2010

¡Hay que tener memoria, hay que tener!

Un grupo de energúmenos, llamados "jóvenes k" le hicieron un escrache a la niña Mirtha mientra hacía su programa en Mar del Plata.

Uno de los carteles que mostraban estos tarados, decía "La oligarquía se sienta en su mesa". Gentuza de poca memoria, o quizá no habían nacido todavía, pero en el año 2003 el recientemente electo presidente almorzó con la diva. Para fin de año el matrimonio K participó de un programa desde Calafate. Eso sí, nuestra futura reina tenía la cara lavada y sin botox (mire la imagen)

Esto es lo bueno de vivir en la era Google e internet. Nadie resiste un archivo. Seguramente en algún lugar de You Tube habrá alguna parte de estos encuentros, en donde, si la memoria no me falla, se burlaron del tren bala que quería hacer Saá.

Todo impresentable y chorreado de grasa. Como los K.

2 comentarios:

Lucy Fer dijo...

Don Escriba, si mal no recuerdo, durante la campaña o ya elegido NK para presidente, la "Diva de los almuerzos" les hizo en cámara una pregunta que se volvió famosa: "Entonces... Se viene el zurdaje...?" con tonito picarón y rosas rococó rosadas.
En ese momento Ella, la Chiqui, era la feliz promotora del advenimiento de Bonnie & Clyde al gobierno nacional y les daba una manija bárbara.

Espero sinceramente que ahora, que está tan decepcionada y molesta con esta cría, haya hecho un auténtico mea culpa y en un acto de contrición le haya dicho al millón de televidentes -que la siguen, atienden y defienden sus opiniones a pie firme !?!- que se dejó empaquetar como carne para chorizo, que agarró viaje como una pichi con el discurso de buhonero de estos dos vivillos y que la manito que les dió fué por pura ignorancia. O negligencia.

Pablo dijo...

Lucy: no me acordaba de esa frase, pero seguramente fue así. Debo reconocer que no miro el programa y que me entero de lo que allí hace a través de los noticieros o artículos de diarios.
Creo que diste en el clavo, porque supongo que la bronca más grande que tiene la Chiqui, fue eso, dejarse empaquetar por el tuerto y la botóxica.