viernes, 20 de febrero de 2009

Sin códigos


Existe un dicho popular, aceptado por todos que dice que "hasta la mafia tiene códigos" o una versión más suave "hasta los chorros tienen códigos". ¿En qué casillero ponemos a este gobierno que ventiló una reunión de carácter reservado, solamente para tratar de dividir a la Mesa de Enlace del campo?

¿No hay principios o reglas que respetar? El "vale todo" ¿realmente es aplicable a situaciones delicadas entre las cuales está el futuro de un país?

Evidentemente con estas actitudes la moral de la tropa K debe andar por el piso, porque se dan cuenta que los usan como trapos para limpiar la suciedad y luego los dejan de lado. El agravante es que estaba el superministro De Vido en el medio.

Las personas que no tienen códigos, más tarde o más temprano quedan marginadas de la sociedad. Un periodista que no respeta su fuente o la versión en off, pierde prestigio y queda en soledad. En el caso de un político que ocupa el más alto cargo político de un país, más allá de la pérdida de votos, ¿cuál sería su peor castigo? ¿La indiferencia popular y de los medios?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todos los días el gobierno produce una chicana, viven del juego sucio, de la extorsión sin que nadie se lo impida, y ahí está lo grave: el pueblo, nosotros, tenemos que reaccionar y echarlos a patadas, la Corte Suprema tendría que reaccionar, la Iglesia tendría que reaccionar, toda la oposición tendría que reaccionar.