"El seudoprogresismo confunde orden con represión, lo que es un grave error. También reivindica los derechos humanos, pero en un Estado democrático los derechos humanos no se reivindican: se cumplen"
Sabias palabras, Don Bergman. Orden por oposición Caos. El Universo tiene un Orden, el mundo en que vivimos tiene un Orden. Los seres microscópicos tienen un Orden. La Naturaleza, obviamente, también. Y esto es algo natural, porque si no fuera así, nos gobernaría el Caos. Y sería imposible que el Universo, nuestro mundo, los seres microscópicos y la propia Naturaleza pudieran sobrevivir, dentro de un sistema donde, cada uno no cumpla un rol y una función establecida, en un marco de leyes y principios que todos debemos cumplir. O al menos deberíamos.
¿No dice la ciencia médica que el cáncer son células que rompieron el orden natural del organismo y se conviertieron en un ejército de ataque al orden natural? Todavía nadie conoce o sabe porqué se produce dicho cambio. Pero, a pesar del Caos que generan, tienen un Orden de desarrollo y acción.
Todos esos pseudoprogresistas, como dice el rabino, ¿hacen sus necesidades en la cocina? ¿manejan de contramano? ¿no pagan las compras que realizan? ¿no tienen respeto con sus padres o hijos? ¿Ejercen su propia autoridad como padres frente a sus hijos o reconocen la autoridad paterna siendo hijos? ¿No aceptan la autoridad dentro de su organización de trabajo, estudio o político?
Si quieren ir contra el Orden del sistema civilizado en el cual convivimos, ¡que vayan por todo! Pero no. No son estúpidos. Van en contra de lo que pueden darle rédito y crédito: putear a la policía, cortar calles, tirar huevos en las embajadas de los países no afines, enchastrar las paredes con afiches, pintar la ciudad con aerosoles y consignas que huelen a naftalina, defender las tiranías de izquierdas que son más buenas que las del otro signo...en fin, la lista sería eterna.
Esto es, desde mi punto de vista, la gran diferencia entre el mundo desarrollado y nosotros. Aquellos comprendieron que el Orden es fundamental para poder convivir y que, dentro de ese paraguas protector, podemos hacer y desarrollar nuestras vidas, independientemente de nuestras ideas.
La falacia Orden=Represión es sinónimo del enanismo mental de la progresía de café, que solo le importa el Caos, para beneficio propio. Y seguramente, cuando cumplan su objetivo, harán lo mismo que aquellos que decían combatir: establecer un nuevo Orden. Pero Orden, al fin.
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