Recibido de un amigo
De cara al futuro, es tiempo de hacer las recomendaciones del caso.
Habiendo sopesado los candidatos presidenciables que se perfilan para el 2011, y a la luz del escepticismo generalizado en la sociedad, es importante destacar que no todo es corrupción e ineficacia.
Una vez más, en la República Argentina, sobresale el nombre del único gobernador que parece estar haciendo las cosas como corresponde. Nuestro candidato no se involucra en internas desgastantes, ni le presta atención a los medios de comunicación, ni lo imitan en bochornosos programas de TV: el hombre no es un divo.
De cara al futuro, es tiempo de hacer las recomendaciones del caso.
Habiendo sopesado los candidatos presidenciables que se perfilan para el 2011, y a la luz del escepticismo generalizado en la sociedad, es importante destacar que no todo es corrupción e ineficacia.
Una vez más, en la República Argentina, sobresale el nombre del único gobernador que parece estar haciendo las cosas como corresponde. Nuestro candidato no se involucra en internas desgastantes, ni le presta atención a los medios de comunicación, ni lo imitan en bochornosos programas de TV: el hombre no es un divo.
Su incansable labor al frente de su territorio le ha permitido sostener una distribución equitativa de los ingresos, promover el comercio exterior, incrementar los índices educativos en una sociedad que de por sí desconoce el analfabetismo y el hambre.
No es menester aclarar más. En las próximas elecciones y en las que vengan hay que votar por Alan Huckle, gobernador del territorio argentino de las Islas Malvinas.
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