miércoles, 12 de agosto de 2009

Es al gas


Hace unos días atrás estaba comiendo con unos amigos. Todos viven en la provincia de Buenos Aires, zona norte. Entre vino y vino, surgió el tema de las facturas de gas y la verdad es que nos cortó el hambre y las ganas de comer.

Uno a uno, relataba el monto que le había llegado y lo que pagaba antes. En todos los casos, el consumo del bimestre había sido entre un 5% y 15% menos, comparándolo con el mismo período del año anterior, sin embargo el precio final había subido. ¿Las cifras? de todo un poco, desde $400 a $1.200, cuando las anteriores habían sido mucho menos.

A su vez, relataban lo que habían recibido sus amigos y parientes. En todos los casos aumentos espaciales. Llamaba la atención que lo que había que pagar, correspondía en su mayor porcentaje a impuestos y no al consumo.

La calentura de la gente es palpable y más aún, para aquellos que también recibieron la factura de luz.

Resulta que ahora, acabo de enterarme que el gobierno dio marcha atrás con este megaombo y que devolverán el excedente cobrado. ¿Motivo? Las explicaciones gubernamentales son antológicas, como siempre sucede con este gobierno. ¿La realidad? es que perdían en el Congreso porque los legisladores le iban a bajar el pulgar a dicho aumento y como si eso fuera poco, tendrían problemas con el tratamiento de la prórroga por los super poderes.

Mire, tengo la sensación que el nivel de ebullición de la masa ciudadana se está acercando peligrosamente a un punto sin retorno y que don K, parece que se tomó una Garompa. Solamente le interesa una cosa: joder a todos y destruir a Clarín. ¿O acaso el acuerdo con el "Padrino" Grondona no apunta a eso, solamente?

Tenemos menos empleo, más gente en la calle, aumento de pobreza, la producción colapsada y ¡vamos a gastar $600 millones en fútbol! Por supuesto que eso no afecta a la inflación que todos padecemos, porque según el INDEK, seguimos viviendo en Kirchnelandia, el país de la fantasía.

Mejor le hago caso a Natalia. Voy a buscar una botellita de vino y tratar de no hacerme mala sangre. Total, K, no se dará por enterado.

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