miércoles, 17 de junio de 2009

Eufemismos

El eufemismo, es definido por el Diccionario de la Real Academia Española como (Del lat. euphemismus, y este del gr. εὐφημισμός). 1. m. Manifestación suave o decorosa de ideas cuya recta y franca expresión sería dura o malsonante.

En mi juventud, el gordo era gordo y no obeso; el ciego no era un "no vidente"; el lisiado o paralítico no era una "persona con capacidades diferentes"; el terrorista era guerrillero o subversivo (que tiende a subvertir el orden público) y no "un joven idealista" y podemos seguir con la lista, que es larga.

Ud. se preguntará a que viene toda esta introducción, pues bien, el gobierno socialista español que se autodefine como rojo y progresista (cuyos funcionarios viven como unos capitalistas burgueses) acaba de anunciar el aumento de los impuestos al combustible y los cigarrillos. Hasta aquí todo bien. ¿Adivine cuál fue el motivo que expuso para tomar esta decisión? ¿Necesidad de caja? No. ¿Compensar el déficit fiscal? No. ¿Imperiosa búsqueda de divisas para tapar el agujero negro de las prestaciones por desempleo? No. ¿Entonces?

Según la vicepresidenta 2° y además ministra de economía, dichos aumentos se realizan como una “necesidad de crear una economía sostenible” y a Cursivasalvaguardar “la salud de los españoles”. Mejor estuvo Zapatero quién su su cara de piedra habitual manifestó "No es un afán recaudatorio" sino "una lucha contra el tabaquismo" No se ría, que este Sr. ya había manifestado en el 2005 que «Disuadir del consumo del alcohol y el tabaco es de izquierdas».

Como ya lo dije en otros post anteriores, la estupidez no es patrimonio exclusivo de los argentinos. Ya lo afirmó Murphy en sus Leyes : "hay dos elementos de carácter universal, el hidrógeno y la estupidez" cuyo corolario atribuido a Einstein dice"aunque del primero no estoy muy seguro"

2 comentarios:

Natalia, la capricorniana alegre dijo...

Pablo: No sea así! A los españoles por lo menos les inventan excusas. A nosotros no siquiera...
Nos la dan todos los días, sin chamuyo ni lubricante.

Ya se lo dije antes, la estupidez no tiene límites, pero a veces se zarpa.

Saludos

Pablo dijo...

Sin lubricante ni un mimo previo.